No hay marcha atrás. Y la nostalgia no debe perturbar el proceso. “El cambio de mentalidad ya no tiene vuelta de hoja”, dijo el director del diario El Mundo, David Jiménez, al inaugurar el Congreso de Periodismo Digital de Huesca. De forma contundente, aseveró que las redacciones se han convertido en laboratorios de innovación.

Pese a que “el matrimonio entre periodismo y tecnología es ya para toda la vida”, la esencia del periodismo debe mantenerse intacta, consideró Jiménez, tras resaltar que “por mucho que cambie la forma de transmitir la noticia, el rigor, la profesionalidad y la honestidad son igual o más importantes que antes”.

#Congresohuesca @DavidJimenezTW: "Yo formaba parte de la resistencia (a lo digital)" https://t.co/6pqR8HuOLl https://t.co/6B8MGqkrJS

— EL MUNDO (@elmundoes) March 10, 2016

En el XVII Congreso de Periodismo Digital de Huesca, el director de El Mundo dijo que la tecnología es una oportunidad:  “Es lo mejor que le podría haber pasado a medios como el nuestro”.

“Hay compañeros que se aferran a la nostalgia, no terminan de asimilar que el tren va a pasar y que al maquinista no le importa quién se suba y quién no“, indicó Jiménez, pero reconoció que la preocupación de los periodistas es legítima, pues el viaje es incierto. Sin embargo, retó a sus colegas a “afrontar el cambio, porque es nuestra única alternativa”, señala la nota difundida por El Mundo.

“Estamos consiguiendo adaptarnos a ese cambio. En El Mundo hemos asistido a un hito. Por primera vez, en 2015, la publicidad de la web ha compensado la caída de la publicidad del papel”, dijo Jiménez , y anotó que “en un mundo lleno de incertidumbres, desigualdades e injusticias nuestros lectores nos necesitan más que nunca”. 

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TIEMPOS NUEVOS

David Jiménez  -quien admitió haber sido parte de la resistencia- lamentó que por la crisis económica y el escenario digital se hayan perdido empleos: “Tenemos heridas, pero podemos decir que hemos seguido y que los lectores nos necesitan”.

El Mundo es ya “un medio digital aunque tenga versión impresa” y se le atribuya “el papel de vieja política”.

Citado por la web oficial del congreso, Jiménez afirmó que la audiencia valora la marca para informarse en momentos como los atentados de París o las elecciones, por lo que “el legado del papel no es un lastre sino una fortaleza”. Para el director de la organización de noticias española, los medios nativos digitales se han convertido “en competidores formidables”, lo que ha hecho de El Mundo -en su opinión- un mejor diario, obligado a innovar más.

Las redacciones como laboratorios de innovación incluyen nuevos perfiles y equipos.

¿Y el futuro de El Mundo? Seguirá imprimiéndose  mientras los lectores lo compren “y mientras, lo haremos con el mayor cuidado posible; a la vez que en otras plataformas”. Y en ese sentido,  la supervivencia de El Mundo “dependerá de crear contenidos originales y de calidad. Si fallamos, lo pagaremos con irrelevancia y desaparición porque hay muchos competidores en las puertas” y ha apostado por “mientras incorporamos ingenieros, reforzar los equipos de investigación; mejorar la rapidez, pero también los controles de edición; probar nuevos formatos/, pero reflexionar y ser autocríticos”.