El periodismo no está llamado a resolver crisis, está llamado a decirlas.
Vicente Leñero.

El perfil del periodista debe cumplir con requerimientos específicos que no cualquier persona puede satisfacer. La habilidad principal de un buen periodista es la tenaz necesidad de informar aquello que lastima a la sociedad y que debe ser reformado. El periodismo no busca solo informar. La vocación es necesaria para el desarrollo académico y profesional, sin embargo, el aspecto económico es indiscutiblemente un punto de reflexión, pues no es suficiente con querer hacer, sino también resulta primordial tener los recursos materiales para poder hacerlo.

Si se compara la carrera de periodismo con otras tantas profesiones, aparentemente resulta ser de las vocaciones menos costosas, pues no requiere necesariamente de herramientas materiales costosas para su estudio; también aparentemente, no requiere de inversiones extras para su aprendizaje. Sin embargo, estas deducciones no son precisas y requieren contexto para poder evaluar realmente la situación de los aspirantes a periodistas.

Se dice que el periodismo se aprende en las calles, como fruto de la experiencia, Esta afirmación no puede cuestionarse debido a que, en efecto, el periodista se construye a partir del contacto con su realidad. Sin embargo, la profesión no es tan sencilla, ya que para todo buen análisis se requiere por fuerza, un cierto grado de carga teórica, tanto para expresar, como para realizar la interpretación más rigurosa. Ahí es donde entra la universidad como el centro de formación profesional.

El estudiante de periodismo necesita forjarse dentro y fuera del aula, dedicar tiempo completo para su aprendizaje, y esa inversión tanto económica como de tiempo, no tienen remuneración inmediata, y en la mayoría de los casos, las dificultades permanecen durante muchos años. El periodismo no es únicamente una profesión, es un estilo de vida de compromiso social.

Es un compromiso que implica dedicación en conocer lo que sucede, en informarse, y la información, es un gasto constante e inexorable. Ya sea en un periódico o en una computadora, es necesario un sustento económico y material para la formación académica y profesional. 

Además de las condiciones individuales, el centro de estudio es un aspecto a considerar: La educación es un bien de consumo, y dicho consumo está supeditado bajo las reglas del sistema capitalista, es decir, la misma universidad es una inversión para el estudiante.

Con base en el estudio Mejores Universidades de México 2013, realizado por la revista de negocios América Economía, se conoció que de las cinco mejores universidades que imparten la carrera en Comunicación, tan solo una, en dos campus, es pública, mientras el resto forma parte del sistema de la educación privada.

Las condiciones económicas para desarrollarse en la labor periodística resultan ser sumamente elevadas. Y para ver lo complejo del panorama, se tendría que abordar las condiciones de seguridad a las que se enfrenta el periodista, pues al ser un mediador con la sociedad, se trastocan intereses de particulares, lo que la evidencia ha demostrado que conlleva a ser una profesión de alto riesgo. Y si además se considera la competitividad laboral, y lo estrecho del espectro empresarial para dedicarse al periodismo, pronto, algunos jóvenes como yo pensarán que el periodismo no es opción profesional.

Por lo tanto, si las condiciones para el futuro periodista son tan adversas, si el periodista requiere de grandes inversiones que difícilmente serán redituables económicamente es válido preguntarse por qué estudiar periodismo.  ¿Por qué dedicarse a una profesión que no respeta horarios y que como ocurre en México a veces significa arriesgar la vida? Tal vez  la respuesta es que el periodismo no es una profesión. Es un compromiso.

Publicado por:

Katheryn Hernández Olvera

Estudiante de Ciencias de la Comunicación con especialización en Comunicación Política en la Universidad Nacional Autónoma de México, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales

Sígueme