El escritor y editor mexicano Felipe Soto Viterbo opina que el principal desafío de un editor es el peligro de la irrelevancia, sobre todo en un entorno donde las cuestiones económicas confunden a los dueños de los medios sobre la principal razón de ser de su negocio, “y están dispuestos a arriesgar la relevancia del medio con tal de mantener la rentabilidad. Algo que, a la larga, sepulta también a la rentabilidad”.

Soto ha sido editor de revistas  Chilango, Time Out y La Ciudad de Frente. Los textos que ha editado han recibido premios en su país y actualmente imparte cursos y talleres como el que ahora mismo dará en Taller Arteluz, Ciudad de México.  Y recientemente se encargó de la edición del libro Narcoamérica, del colectivo Dromómanos (Tusquets, 2015).

 

A continuación 10 preguntas básicas sobre el trabajo de un editor:

1. ¿Qué es un editor?

-Es un perfeccionista que tiene demasiadas ideas para publicar y muy poco tiempo para escribirlas, así que se las encarga a otros, no sin antes asegurarse de que esos otros las escriban, o fotografíen, o ilustren, o graben en video, o divulguen en las redes tal como él lo hubiera hecho.

2. ¿Cuáles son sus principales funciones?

-En el ámbito de las publicaciones periódicas (periódicos, páginas web o revistas) es el orquestador detrás de todos los contenidos. El que convoca los temas, los autores, las fuentes privilegiadas, en ocasiones incluso convoca al capital y, en última instancia, a los lectores. También puede escribir algún texto de vez en cuando; o corregir estilo, o pelearse con los dueños del medio, o hasta dibujar el cartón humorístico, pero eso ya es por su manía de meterse en todo.

3. ¿Cómo se desarrolla el instinto del editor?

-A fuerza de ver publicados sus errores, una y otra vez. En realidad es instinto de supervivencia en la jungla, pero acá los animales salvajes usan procesadores de palabras, los cazadores te señalan las erratas y las omisiones, y las historias son esas presas huidizas detrás de las cuales están muchos otros depredadores.

4. ¿Cómo planear los contenidos?

-Para eso hay algunos secretos y tips; pero básicamente se trata de armonizar los temas, los recursos, el tiempo, el equipo humano, las fuentes, los autores y los imprevistos de modo que nunca te quedes sin material para publicar. Mi curso en Taller Arteluz va sobre todas estas cosas, por cierto.

5. ¿Cómo realizan la verificación de la información?

-En otros países, más civilizados, hay departamentos enteros dedicados a la verificación de datos. Aquí en México, como somos más llaneros, esa función la realizan los propios reporteros y editores; por lo que terminan siendo los lectores y las propias fuentes los que acaban hallando todas las pifias. Eso no debe de ser así.

6. ¿Cuál es la diferencia entre editar para la web y para las redes sociales?

-A la web accedemos por las redes sociales: nos recomiendan un artículo, un video, una canción y entonces damos clic. Antes no era así, antes cada medio tenía su home y la idea era que el lector entrara a esos portales directamente o por accidente. Ahora, las redes sociales son en realidad nuestra página de inicio, y cada contenido es la puerta de entrada a nuestro medio. Al home ya nadie lo pela. Por tanto, no puede separarse una cosa de otra. El texto de tu estatus o tu tuit debe ser capaz de competir exitosamente con el resto de los estatus, tuits y el resto de los contenidos que las redes sociales de tu audiencia comparten. El sumario debe llevarte a leer el artículo y el título y el texto deben atraparte y no dejarte ir.

7. ¿En qué enfocarse para la corrección de estilo?

-Más que en qué enfocarse, la pregunta debería ser cómo no perder el enfoque en la corrección de estilo, porque es lo primero que se descuida. Cada vez más, los textos de los medios electrónicos en México van mostrando un desaseo lamentable, muestra de que nadie se preocupa. La redacción es torpe, la ortografía, precaria, y las erratas se multiplican como larvas.

8. ¿Cómo innovar en los contenidos?

-Arriesgándose. Hay que favorecer la posibilidad del fracaso en los equipos y sacar provecho de esas experiencias, que muchas veces no son tales, sino experimentos fallidos. Todos sabemos que no hay innovación sin experimentación, y que el motor de la experimentación es el fracaso del experimento, ya que es la única manera de llegar a la fórmula exitosa. Sólo que a diferencia de la ciencia, aquí la fórmula nunca se repite.

 

9.¿Cómo saber si se está listo para ser editor?

-Hay señales preocupantes de ello: vicio por la lectura (y dije claramente: vicio, que leer en cantidades moderadas no hace editor a nadie), trastorno obsesivo compulsivo complicado con trastorno de déficit de atención (que como son opuestos, sólo se complican), perfeccionismo, snobismo, síndrome del escritor frustrado, tendencia a autoboicotear la propia vida social o sentimental, tendencia a enfrascarse en discusiones bizantinas, sadismo, masoquismo, y sarcasmo. El alcoholismo, por cierto, es opcional.

10. ¿Qué capacidades debe tener un editor?

-Debe ser capaz de ver las cosas con profundidad mayor a la de todos los demás y ser capaz de traerla a la superficie, de comunicarla de modo sencillo. Entender lo que el periodista no captó y concebir lo que el lector no imaginó nunca.

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