Según los informes, dejó el periódico en marzo debido a que sentía que no era capaz de expresar críticas al Gobierno ucraniano, informa The Oslo Times. 

La organización de Periodistas Canadienses por la Libertad de Expresión (CJFE) insta a Ucrania a demostrar su compromiso de acabar con la impunidad y garantizar el derecho a la libre expresión mediante la búsqueda de la justicia rápida para este caso.

Freedom House refirió que el ataque a los periodistas y medios de comunicación debe alarmar al Gobierno ya todos los ciudadanos. En tanto, Human Rights Watch señaló que “el asesinato de un periodista ferozmente franco en plena luz del día es un crimen atroz que debe ser investigado a fondo”.