En la entrevista, Baquet –cuya trayectoria es impecable– confirmó que él había expresado a Sulzberger su consternación por sus intenciones de traer a otro jefe adjunto y reconoció que esas acciones propiciaron el despido de Abramson. Pero Baquet también dijo que no exigió acciones contra Jim. La versión oficial de NYT, dada en medio de la crisis, es que no hubo discriminación de género. Eso no es todo. Se le responsabiliza de decisiones arbitrarias.

LA HISTORIA DE LA TORMENTA

En los últimos días, Baquet ha buscado, cita NPR en su amplio informe, calmar los ánimos de reporteros y editores, quienes se vieron en medio de la tormenta.

“No es ningún secreto que mi lugar como editor ejecutivo fue precedido por un periodo de agitación”, dijo Baquet, quien puntualizó que uno de sus primeros trabajos es asegurar que la turbulencias no se crucen en el camino de los planes de NYT.

Abramson no quiso hacer comentarios sobre el tema a NPR, que se basa en entrevistas con dos docenas de colegas y asociados de Abramson y Baquet, actuales y anteriores. Casi ninguno estaba dispuesto a hablar sobre el tema, ya sea porque siguen trabajando en el periódico o porque tienen vínculos profesionales con una o varias de las figuras en el centro de la controversia.

Además, Sulzberger –cita NPR– pidió al personal no hacer más olas con el tema.

No obstante, esas entrevistas permitieron a la radio señalar que Abramson es brillante, pero brusca y en ocasiones brutal en su trato con el personal.  Baquet destacó el juicio noticioso de Abramson y dijo que habían complementado sus fortalezas. Además, elogió los ocho Pulitzer que ganó el diario durante su gestión, pero criticó la tendencia periodística de ver al editor como una persona dura e implacable.

“No creo que los líderes tienen que ser o deben ser duros. Los líderes tienen que tomar decisiones difíciles”, dijo, tras reconocer que también puede llegar a irritarse.  “Yo tengo mi temperamento”, confiesa.

Baquet comentó que si un director se muestra amable, agradable y brinda apoyo es visto como suave.

NIEGA DISCRIMINACIÓN

“Yo no creo, por cierto, de que Jill fue despedida debido a su género“, indicó Baquet a NPR, al tiempo de reiterar que el despido dependía de relaciones fallidas entre Abramson y el personal.

Lo cierto es que quería contratar a alguien más. Se trata de Janine Gibson, directora superior de operaciones de noticias de Estados Unidos del diario The Guardián.

“Durante la mayor parte de mi relación con Jill, teníamos discusiones sobre los debates que dos personas muy fuertes de voluntad tienen cuando están manejando una organización de noticias grande. No eran desagradables y tengo un gran respeto por ella”, manifestó.

“Lo digo en serio cuando digo que dentro de tres años nadie va a recordar esto. Lo que van a recordar es que era una gran periodista y una editora remarcada”, concluyó.