Liberation, el histórico diario de la izquierda francesa, afronta una de sus peores crisis: ha perdido 100 mil euros mensuales, tiene una deuda de 6,4 millones de euros, el director ha dimitido, y todo hace indicar que no hay recursos para pagar salarios en marzo.  

Se veía venir. Los periodistas habían expresado hace unos días su indignación por la decisión de los directivos del diario, quienes plantearon convertir al medio en “una red social” y en un espacio donde se creen contenidos rentables para una gran variedad de plataforma. La indignación llegó con un mensaje en la portada que lo decía todo.

Ante este panorama que se agudizó con la falta de liquidez,  Nicolas Demorand, director del rotativo, renunció. Su decisión responde a un pedido de los periodistas.

Sus principales accionistas, Bruno Ledoux y Edouard de Rothschild, quienes poseen el 53%el capital, solo aceptan refinanciarlo a cambio de transformar la sede del diario en un espacio cultural y crear una red social alrededor de la marca Libe. Esto, como ya dijimos,  no es bien visto por los trabajadores, quienes creen que es un golpe al equipo, a la historia del diario y a sus valores.

“Lamentablemente, ‘Libération’ sufre una crisis abierta (…) y creo que es mi responsabilidad como director dar más margen de maniobra y negociación”, dijo Demorand.

La situación es preocupante. De acuerdo a varios reportes, la redacción del periódico se ha atrincherado en los locales del periódico. “Desde el viernes pasado, Liberation continúa publicándose en un clima de tensión excepcional. El periódico apenas se distribuye, cuando llega a distribuirse. Ausente el director, una asamblea y un comité de redactores realizan un periódico que «da» la palabra a los accionistas, pero consagra gran parte de las primeras páginas a contar la crisis desde la óptica de la redacción”, detalla Abc.es.

Con datos de Abc.es

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