Un reportero del diario mexicano Zócalo de Saltillo, en Coahuila (al noreste de México), fue golpeado por trabajadores de un burdel y auxiliado por otros colegas que lo llevaron a un hospital.

La agresión en contra de  César Ramírez, ocurrió una semana después del crimen del fotógrafo del periódico Vanguardia Daniel Alejandro Martínez Bazaldúa, de 22 años (el pasado 24 de abril). El hecho no fue documentado por medios locales de Coahuila.

Periodistas mexicanos consultados por Clases de Periodismo relataron que la golpiza provocó lesiones en el rostro del comunicador.

César, según la reconstrucción de testimonios, cubría el incendio del table dance Heaven Night Club, ubicado en el municipio de Ramos Arizpe e instalado desde finales del 2003 en esa zona.

-A nosotros nos hablaron del incendio después de las 11:00 de la noche a la redacción, indicó un reportero que cubre sucesos para otro diario local.

El reportero de Zócalo, se aproximó a la zona. Sus colegas de otros medios que minutos antes cubrían a distancia el evento, ya se habían marchado.

– Llegó él solo y lo encararon guardias del lugar. Le quitaron la cámara y comenzaron a golpearlo. También estaba una mujer y policías.

– ¿La policía intervino?

– No, ellos solo fueron testigos, narró el informante.

César Ramírez pidió auxilio a periodistas de otros medios que se encontraban cerca. Antes, con el ojo muy dañado por los golpes, condujo algunos kilómetros hasta detenerse.

Sus compañeros lo llevaron a un hospital donde fue dado de alta por la madrugada.

El periódico Zócalo  no publicó la noticia de la agresión en contra de su trabajador.

En enero de 2010 un periodista de esa casa editora, Valentín Valdes Espinosa, fue asesinado después de ser secuestrado por hombres armados.

Según investigaciones de la policía, el incendio en el Heaven Night Club fue causado por un grupo delictivo como parte de la disputa entre dos organizaciones criminales de esta región.

La quema de negocios en México es utilizada por cárteles de drogas para exigir el pago de cuotas a cambio de ofrecer supuesta protección.

En la región conocida como La Laguna (Torreón), a unos 300 kilómetros de donde fue el incendio, grupos de sicarios han quemado decenas de locales y asesinado a personas en bares y centros nocturnos por la pelea de territorios.

REPORTEROS Y MEDIOS EN RIESGO

El pasado 24 de abril fue asesinado el fotógrafo de sociales del diario Vanguardia, Daniel Alejandro Martínez Bazaldúa.  Hasta el momento no se han esclarecido las causas del crimen.

El asesinato provocó tensión entre el gobierno de Coahuila y directivos del periódico que cuestionaron la forma en que la fiscalía de ese estado, criminalizó al fotógrafo muerto sin antes realizar una investigación.

“Nos parece triste y alarmante que Coahuila se convierta en un Estado en el que la autoridad condene a personas asesinadas, convirtiéndolas en delincuentes, sin que para esto ofrezca el mínimo de pruebas o argumentos, como ocurrió anoche” dijo Vanguardia en una postura oficial.

Fue el propio diario el cual en la búsqueda de su colega desaparecido, ató cabos y descubrió que su cuerpo había aparecido horas antes al sur de Saltillo sin que la fiscalía local identificara el cadáver mutilado.

Los periodistas entrevistados, aseguran que en esta región hay una alerta roja por la facilidad con la que cárteles amagan a periodistas y sus empresas.

Muchas de estas empresas de medios, reciben grandes cantidades de publicidad gubernamental a cambio de no documentar sucesos violentos que afecten la imagen de políticos locales, varios de ellos investigados por presuntos conexiones con traficantes de drogas.