Desde su smartphone, la corresponsal de la Agencia France Press en Gaza Sara Hussein tuiteó en vivo el conflicto entre el ejército israelí y el movimiento palestino Hamas. Esta red social, como contamos aquí, se convirtió en una gran aliada no solo como fuente de información sino también para promover su trabajo.

La periodista usa Twitter hace tres o cuatro años, cuando empezó a seguir a otras personas y a retuitear enlaces a sus artículos. En Gaza, esta plataforma se volvió indispensable, debido a la cantidad de información que circulaba sobre la guerra. “Es una extensión de lo que hago como periodista todos los días”, dice.

En Gaza, a veces veces tuiteaba imágenes y audios que no tenían la suficiente calidad como para ser enviados a AFP. “Esto permitió a la gente a experimentar lo que vi, lo que oí”, recuerda.

Hussein dice que la gente no ve todos sus artículos escritos para AFP en los diversos medios de comunicación, pero la siguen en Twitter porque saben que van a tener el enlace a todos sus artículos que escribe desde la oficina en Gaza. 

La corresponsal cuenta que en AFP les pidieron que usen Twitter y que siempre estén conectados. Sin embargo, los periodistas son cautelosos para no interferir con la información que difunde la agencia, sobre todo cuando saben que van a lanzar una alerta informativa.

Lo interesante, según Hussein, es que hay tantas cosas que no se dicen en los despachos, “ya sea porque no tienen espacio suficiente, porque requieren más explicación o porque es un detalle que no es necesario a la historia”, que pueden interesar a algunos lectores y que son libres de ser tuiteadas.

Lo que sí tiene bien claro Hussein es que su cuenta de Twitter la identifica como una periodista de la AFP, que debe tener cuidado con lo que escribe y que no puede poner nada que dé una imagen falsa de ella o de su trabajo y que los ponga en riesgo. No obstante, hay cosas personales que sí escribe en Twitter porque considera que son parte de su vida como periodista, como cuando cuenta que se despierta en medio de la noche en Gaza.

A pesar de su precauciones, Hussein ha recibido tuits amenazantes o desagradables, pero ella los toma con calma porque considera que esto es parte de la naturaleza de las redes sociales: “La gente puede comentar en Twitter, enviar mensajes y no sabes quiénes son, si dan su nombre real o no”, dice.

Visto en Journalismes.info.

Publicado por:

Elena Miranda

Periodista.

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