A 6 meses del secuestro y asesinato de los periodistas ecuatorianos Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra en Colombia, se revela mayor información sobre las acciones que tomaron los gobiernos de Colombia y Ecuador frente a la situación.

Un consorcio binacional de periodistas investigó los motivos del secuestro y las circunstancias en que Ortega, Rivas y Segarra fueron ejecutados. La investigación, titulada Frontera cautiva: tras los rastros de los periodistas ejecutados. 

“Una investigación sobre cuán cerca estuvieron el reportero Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra de ser liberados por una narco milicia disidente de las FARC que los secuestró, a finales de marzo de 2018, y asesinó, unos días más tarde, en la frontera entre Ecuador y Colombia”, señala el trabajo colaborativo que muestra cómo se comunicaban los servicios de inteligencia con los criminales, “el secretismo e indolencia de los gobiernos de ambos países y lo que grandes medios ecuatorianos y colombianos sabían y no divulgaron”.

El 25 de marzo, los periodistas llegaron a la ciudad fronteriza San Lorenzo, provincia de Esmeraldas donde fueron a reportar la explosión de un cuartel de policía. Al día siguiente, a las 09:00 horas, pasaron por el control militar de ingreso a Mataje, rió fronterizo con Colombia.

Las autoridades ecuatorianas mencionan que fueron registrados y advertidos del peligro. Los pobladores cuentan que alguien se les acercó, que conversaron y luego siguieron a esta persona. “Ellos le van siguiendo a ese señor”, declaró una fuente anónima.

“Se embarcan en una canoa y los pasan al otro lado. Pero ellos fueron sin presión, y cuando llegan allá y los meten más adentro (les dicen): ‘ahora sí, están detenidos’”, señalan.

Alrededor de las 5 de la tarde del 26 de marzo, el mayor de la Policía de Ecuador Alejandro Zaldumbide, jefe de Gestión Logística del Distrito de Vigilancia San Lorenzo, recibió un mensaje de texto del “Guacho”, líder del Frente Oliver Sinisterra, un supuesto grupo detractor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

“Tengo tres personas retenidas, ecuatorianos, dos periodistas de Quito y el chofer” y le exigió una respuesta en 10 minutos, de lo contrario “desaparecerán esos señores”. El mensaje fue enviado junto con fotografías de los secuestrados que vestían con la misma ropa al salir del hotel.

ENGAÑO DE LOS ESTADOS

Primero, el entonces presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aseguró que que alias ‘Guacho’ era de nacionalidad ecuatoriana y que lo sucedido fue en Ecuador. Después tuvo que retractarse. El Gobierno de Ecuador no ha divulgado hasta hoy que se gestiono un operativo de rescate.

El diario El Tiempo habló de una supuesta liberación. El medio atribuía su información a altas fuentes militares con credibilidad y verificación de los datos en terreno. Yadira Aguagallo, pareja del fotógrafo Paúl Rivas, comento que el rumor  vino del entonces ministro de Defensa colombiano, Luis Carlos Villegas.

Un fiscal ecuatoriano, quien se mantiene en el anonimato, esperó a los secuestrados en la Base Naval de San Lorenzo cinco horas, pero los periodistas jamas aparecieron. El plan era acompañarlos en helicóptero hasta el aeropuerto de Esmeraldas y después viajarían en avión a Quito.

Durante conversaciones con las autoridades ecuatorianas vía WhatsApp, la agrupación exigía, desde enero de 2018, la liberación de tres de sus guerrilleros detenidos en Ecuador, y la cancelación del acuerdo contra el narcotráfico con Colombia.

El 7 de abril, ‘Guacho’ envió su último mensaje: “Para cuándo me libera a mis muchachos, o mato a los periodistas, y dígale a ese ministro del Interior que le tengo en la mira y mis ataques y bombas van a continuar. Hoy a las 3 les mando el vídeo de uno de ellos muerto”. Seis días después, el presidente de Ecuador confirmo el deceso de los periodistas.

Un testigo de la Fiscalía colombiana, declaro que Efraín Segarra preguntó a sus captores si los iban a matar. Un gatillero alias “Perú”, le habría contestado: “Sí, porque el Gobierno ecuatoriano no cumplió con el acuerdo”.

Después de mas dos meses, el 21 de Junio, equipos forenses y policías rescataron los cuerpos de los trabajadores de El Comercio Ecuador.

Aun con esta información el caso sigue dejando preguntas por aclarar.