Flor Coelho, gerente de Investigación y Training en la Gerencia de Desarrollo Multimedia de La Nación de Argentina, remarca que no hay un modelo de redacción ideal. Cada organización de noticias, explica, tiene que buscar su camino en función de los recursos que posee sobretodo humanos. Se refiere a la capacidad de adaptarse al cambio de las personas, no importa la edad “a veces lo que importa es la cabeza”.

Estamos en la redacción de La Nación en Argentina, Coelho destaca como claves para todo redacción optimizar procesos y aprender de las personas de cada sección: “Hay algunas que son pioneras, otras no. Después viene el efecto contagio, o sea, cuando vez que unos pudieron y ves cómo se están arreglando y cómo es que son los líderes,  eso da un testimonio a otras secciones. Eso va a pasar así como pasó con los blogs, con el uso de Twitter, con proyectos de data. Siempre hay un proceso que no es lineal, que es ascendente”.

Desde esa perspectiva y “para no ir dejando muertos en el camino”,  Coelho defiende la idea de tener una dirección clara sobre qué queremos modernizar y cómo queremos aplicar las nuevas tendencias de periodismo. La capacitación es fundamental.

¿Cómo se hizo el proceso de La Nación?

–Acá estamos en un proceso largo. Yo empecé acá a trabajar en el 2006, en mayo. Llegué para empezar a capacitar a la redacción, eran unos talleres informativos de cinco o seis distintas herramientas que podían servir. Después hicimos unos trainings en base a los de la Knight Center, a la propuesta de Mark Briggs (especialista en alfabetización digital y autor del famoso libro “Periodismo 2.0”).

Coelho detalla que se hizo un programa de entrenamiento multimedia intenso, donde participaban periodistas del papel y del online, diseñadores, videógrafos y se mezclaban los equipos durante jornadas de hasta seis días.

La Nación posee hoy uno de los equipos más competentes y envidiados del mundo. Nos referimos a La Nación Data.

Cuál es el perfil profesional que consideras ideal o necesario en una redacción. ¿Cuáles podrías destacar que son necesarios?

–Quizá una persona puede tener varias habilidades, pero no un perfil exactamente. Me centro más en las habilidades de una persona de la redacción. Es necesario tener una actitud de aprendizaje e innovación porque te van cambiando las herramientas. Tienes que cambiar una cosa así como cultural, tienes que hacer marketing de tu trabajo sin tener vergüenza. Por ejemplo, tuitear tus notas, promocionar tus trabajos en redes. No se trata de decir “esta es mi gran nota”, pero pueden escribir “les comparto, lean el último análisis de tal cosa”. El que te sigue en Twitter o en Facebook está esperando eso. Hay que saber titular para redes, para los resultados de búsqueda de Google. También me parece que de a poquitos los periodistas deben aprender a manejar Excel. Para mí en las universidades debe ser materia obligatoria.

¿Las universidades en Argentina están enseñando Excel a sus alumnos de periodismo?

-No tanto. Lo que nosotros hacemos acá en el máster de Periodismo de La Nación es una introducción a eso y después para los periodistas que se quedan trabajando en la redacción desarrollamos talleres.

¿Crees que todos los periodistas deben saber manejar los datos

–Me parece que hay niveles. Así como hay un uso muy avanzado de redes sociales para investigar también tenemos una cosa muy básica con datos de cinco a diez funcionalidades del Excel que deberían poder manejarlo todos. Creo que los periodistas van a terminar su carrera sin usarlo y van a poder igual trabajar, pero si estás estudiando periodismo ahora y quieres ser parte de una redacción como está el mercado, me parece que esto te va a distinguir del resto.  Y te permite encontrar primicias. En muchos países latinoamericanos, los periodistas están en problemas con los gobiernos y quizás no tienen fuentes que les hablen. El hecho de poder manejar tablas de sitios en PDF y poder ordenarlas, filtrar, y sacar conclusiones es necesario para acceder a la información.  

¿Y las redacciones pequeñas también lo pueden hacer sin invertir tanto dinero?

–Sí, claro, totalmente. En Internet hay muchos cursos y tutoriales gratis.  Yo casi me fui capacitando por internet, viendo cuáles eran buenas fuentes o qué conferencias iba a mirar por internet. Seguía hashtags, personas en Twitter que comparten cosas. Tienes que tener una actitud de querer aprender y saber usar  la red para hacer consultas a otros.

Remarca que es clave querer aprender, querer familiarizarte con las nuevas tecnologías, y las redes sociales: “Si tu redacción tiene un publicador con Analytics, cada tanto mira las métricas, cuáles son las notas más buscadas, chequea por dónde entra la gente (si por redes o por el home)”.

LA NACIÓN DATA

Por el año 2010, con las ideas claras sobre lo querían hacer, una conferencia en el Investigative Reporters and Editors (IRE) determinó el nacimiento de La Nación Data. Dos periodistas, con larga trayectoria en la organización, impulsaron el cambio. Se refiere a Momi Peralta Ramos y Ricardo Brom, quienes formaron parte de la web en 1995: “Entonces fue bueno tener a dos seniors, personas con crédito interno y muy nacioneros. Ellos empezaron a empujar el proyecto data. Eso ayudó mucho a que tuviéramos más posibilidades de fluir dentro del medio. Cuando eres joven, recién llegado y tienes una idea buenísima, hay que hacer el camino. Momi y Ricardo nos ahorraron barreras internas.

¿Cuántas personas trabajan hoy en La Nación Data?

–Hay como un staff estable que hace solo Data formado por siete personas que estamos acá. Después, en la parte de creatividad, hay dos o tres que trabajan en ilustraciones, especiales multimedia. En total, diez personas. 

La capacitación no acaba. Y en La Nación esto se mantiene. Hay una disposición de ayudar a los periodistas.  “Algunas personas se acercan a la unidad de Data ante situaciones que no pueden resolver solos o tienen una idea. También se da al revés, que nosotros mirando bases de datos decimos ‘esto le tiene que interesar a alguien de educación’. Entonces, vamos a buscar a los periodistas de educación para ver si les interesa el tema. Nos sirvió mucho que en los premios – ganamos muchos premios en periodismo de datos – se resaltara el crédito interno de personas que forman parte de una redacción tradicional”.

Se trata de que los productos de La Nación Data tengan impacto en el impreso, y viceversa. Ya usan sus propias visualizaciones y, poco a poco, se han adaptado. Ya no piensan solo en el papel. La palabra que más pronuncia Flor es capacitación, y esta se realiza de manera organizada y constante. Pero si algo tiene muy claro es que deben seducir a la gente hacia el cambio y no imponerse.

Parte de la tarea que han desarrollado con la finalidad de tener más contenido online, es que todos aprendan a usar el publicador.

¿Qué recomendaciones le darías a una redacción que quiere implementar un área de datos?

–Para mí una redacción chiquita puede hacerlo. Lo importante son las personas. Que les guste.  Tienes que ir buscando aliados. Ricardo se unió desde el sector de tecnología, hubo personas que se contrataron de afuera para cosas puntuales como fue una experta en acceso a la información pública. Es necesario encontrar a personas en la redacción que quieran aprender cosas nuevas: “Es como cambiarte de trabajo sin cambiarte de trabajo.  Esto te da un conocimiento profesional, te da una frescura y quizás puedes tener 25  años trabajando en el mismo diario y no te aburriste porque tuviste nuevos desafíos, aprovechando lo que hay. La actitud de ‘ahora qué tengo que aprender, qué viene ahora’ es saludable. 

Flor Coelho cree que es necesario tener evangelizadores internos, que estén en la hora de almuerzo, en el pasillo, que estén insistiendo.

¿Cómo te obsesionaste con los datos?

–En La Nación  una de mis principales tareas es investigar los medios y yo ya venía viendo lo que hacían Los Angeles Times, The Guardian… Yo me fui enamorando de esto. Mirando las buenas prácticas de periodismo empezamos. 

Flor Coelho no es periodista. Es abogada. Y llego al periodismo al enamorarse de Internet. Ella tenía banda ancha en 1997, algo que no era muy común. Fue descubriendo el poder de la red hasta que un día se dijo: “no quiero ser más abogada… esto es magia, me emociona”. Y la contrataron para investigar y evangelizar a la redacción. Todo cambió para ella y en parte también para la organización de noticias. Fue un trabajo en equipo, y Flor lo resalta y lo reitera. Sin un gran equipo nada hubiera sido posible.

Ver Flor Coelho: “Excel debe ser obligatorio en todas las facultades de periodismo”