Foto: B. Hoenk.

El fotógrafo freelance Bill Hoenk fue el único reportero gráfico que estuvo cerca a la línea de meta de la maratón de Boston, justo en el preciso momento en que la segunda bomba detonó.

Llevaba  40 minutos cubriendo el evento cuando escuchó la primera explosión. “Vimos el humo y escuché gente gritando, a continuación, en cuestión de segundos, la segunda explosión ocurrió directamente a 30 metros de mí”,  declaró Hoenk al portal LighBox. Sus fotografías son hasta el momento las únicas que registran el momento de la segunda explosión.

Son varios los gráficos que tras la tragedia continúan registrando la escena del desastre. Esto también hizo Bill Hoenk, quien a pesar de estar aterrorizado con la situación, no apartó la cámara de sus manos. “El instinto me dijo que no me preocupara, que solo debía seguir tomando fotos porque era la única persona con una cámara. Así que seguí”, añadió.

EL ROSTRO DE LA TRAGEDIA

Las fotos de Hoenk son impactantes. Tanto es así que Time seleccionó una de sus instantáneas para la portada de la edición de la revista del mes de mayo.

En la fotografía se puede ver a un policía cargando a una niño muy asustado. Hoenk contó a LightBox que tuvo mucha dificultad para obtener la escena debido al caos. Utilizó un teleobjetivo para facilitar la captura de la imagen. Impactado por la experiencia, Hoenk confesó que cuando mira la fotografía recuerda los gritos del niño y empieza a llorar.

Foto: B. Hoenk.

“Después de unos segundos, la Policía comenzó a gritar frenéticamente para que la gente deje la escena inmediatamente por la posibilidad de una tercera explosión, fue entonces cuando decidí que no quería estar ahí”, refirió el reportero.

Cada vez son más los  testimonios de hombres de prensa, entre reporteros y fotógrafos que, cumpliendo su trabajo, vivieron momentos de tensión en la tragedia que ha marcado al pueblo norteamericano este 2013.

Publicado por:

Lucia Calderón Portugal

Estudiante de comunicaciones de la Universidad de Lima.

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