Samsung Electronics dijo ayer que fueron defectos en las baterías los que provocaron peligrosos incendios en su modelo de teléfono móvil Galaxy Note 7, el cual tuvo que dejar de fabricar.

Una detallada investigación presentada en Seúl por el responsable de su división de telefonía móvil, Koh Dong-jin da cuenta de esta información.

DATO: 96% de los teléfonos Galaxy Note 7 han sido devueltos. Se vendieron 3 millones de unidades.

El estudio señala que algunas de las baterías de ion-litio estudiadas registraron cortocircuitos internos y que algunas carecían además de membranas de aislamiento por errores en el proceso de fabricación.

Tras un mes de investigaciones y de otras tres organizaciones: las consultoras estadounidenses UL y Exponent, y la empresa alemana de inspección técnica y certificación TÜV Rheinland, los resultados fueron contundentes.

Koh explicó que unos 700.000 investigadores e ingenieros recrearon procesos de carga y descarga con unos 200.000 dispositivos y unas 30.000 baterías de ion-litio para detectar y analizar los fallos.

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