El futuro de la prensa en los Estados Unidos no es para nada alentador luego de la victoria de Donald Trump sobre Hillary Clinton.

El candidato ha demostrado en varias ocasiones no valorar el papel crítico que desempeña la prensa dentro de una democracia.

Ha llamado a la prensa «escoria», la ha tildado de «corrupta» y ha mostrado interés en regular el trabajo de los periodistas a través de leyes.

Es público que Donald Trump no tiene una buena relación con los medios de comunicación, a quienes acusó de envenenar la mente de los votantes. Varios periódicos e influyentes revistas publicaron editoriales llamando a votar por Hillary Clinton al considerar a Trump una amenaza.

Luego de estos antecedentes, existe gran incertidumbre sobre la postura que ejercerá sobre la libertad de expresión.

La periodista Margaret Sullivan de The Washington Post hizo una revisión a esta situación y propuso los siguientes deberes para la prensa:

1.  La prensa tiene que tener una posición fuerte y valiente ante futuros agravios.

2. La prensa tiene que estar alerta y cumplir un papel vigilante con respecto a las acciones que se tomen durante el gobierno de Donald Trump

3. La prensa tiene que velar por la libertad de expresión y denunciar cuando se quebrante los derechos de los periodistas dentro de los Estados Unidos.

4. Se debe evitar la adulación, especialmente porque la prensa está tratando con un presidente que disfruta alimentar su ego.

5. Las organizaciones de noticias y los periodistas tienen que estar dispuestos a ir a los tribunales si es necesario.

Publicado por:

Lucia Calderón Portugal

Estudiante de comunicaciones de la Universidad de Lima.

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