Para cualquiera, 500 días de prisión es una pesadilla. Mucho más si te encuentras en un país lejano, desconocido y con políticas de derechos humanos bastante cuestionados. Hoy, Jason Rezain cumple 500 días en una cárcel de Irán.

De acuerdo con The Washingtong Post, el detenido en la prisión Evin de Teherán no puede recibir visita de su abogado y ya tiene condena, pero increíblemente nadie sabe el tiempo de carcelería impuesto y los detalles. Solo se conoce que se le imputan cargos de espionaje. Jason Rezain está mal de salud.

“Rezaian sigue perdiendo peso; sufre de complicaciones con la presión arterial y otras condiciones médicas físicas y mentales que permanecen no tratadas o mal tratadas “, dijo el diario, tras exigir su liberación y denunciar que ha sido objeto de nuevos interrogatorios, maltrato psicológico y maltrato físico. Se ve privado a las interacciones humanas normales, denuncia El Post. Eso no es todo: debe llevar una capucha cuando es escoltado alrededor de la prisión por los guardias o interrogadores y es monitoreado de cerca en todo momento.

Tras ser arrestado en julio de 2014 junto a su esposa, en octubre ella fue liberada. Yeganeh Salehi, una periodista iraní, no ha dejado de demandar libertad para Razain, quien a pesar de la doble nacionalidad (estadounidense -iraní) sufre maltrato.

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@cdperiodismo

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