El presidente Barack Obama anunció sorpresivamente la renuncia de su secretario de prensa, Jay Carney, de acuerdo con The New York Times.

“Hoy el chaleco antibalas se pasa oficialmente a una nueva generación”, dijo el mandatario, respecto a Josh Earnest, quien lo reemplazará en la labor de portavoz del presidente.

Jay, según el jefe de Estado, se ha convertido en uno de sus mejrores amigos y consejeros. También destacó su buen juicio, temperamento y corazón.

Carney, un veterano periodista, consiguió –según la prensa política–que el vicepresidente, famoso por hablar demasiado o confundirse en sus intervenciones en público, se haya convertido en un ejemplo de discreción.

Carney fue seleccionado entre una serie de finalistas que incluyeron a los actuales portavoces adjuntos de la Casa Blanca, Bill Burton y Joshua Earnest.

En una entrevista, Carney, de 49 años, dijo que se iba después de más de tres años al lado de Obama– y más de cinco años en la administración pública– para dedicar más tiempo a su familia. Fuentes citadas por NYT refieren que el exsecretario de prensa quiere regresar al sector privado por razones financieras.

Ann Compton, veterano corresponsal de la Casa Blanca para ABC News, dijo que Jay había mostrado respeto por los reporteros y sus necesidades profesionales. No obstante, cuestionó las prácticas de la oficina de prensa de la Casa Blanca, la cual venía imponiendo restricciones cada vez más ridículas.

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