El fotógrafo documentalista Stephen Shames tiene más de 45 años de experiencia en el rubro. Ha trabajado sobre la pobreza infantil, problemas de discriminación, soluciones a la pobreza y más.

En octubre publicará un libro sobre un grupo de jóvenes que ha crecido en medio de las drogas y la violencia.

En una entrevista compartió tres sugerencias para los fotógrafos amateur.

1. Di algo que sepas. Algo que te conecte con lo que sabes es un inicio ideal. Si, por ejemplo, has montado caballos. Haz una historia sobre caballos. Tus conocimientos profundos sobre un tema te permitirá ver cosas que otros ignoran.

La fotografía puede ser también exploración. El inicio puede ser familiar, pero puedes acercarte a temas que no manejes.

Debes intentar darlo todo sobre lo que retratarás. Debes vivirlo. La primera vez que fui a India, escuché su música, leí novelas y otros textos de autores de ese país. Tenía que pensar como un ciudadano de ese lugar.

Tienes que estar atento a descubrir sentimientos de lo que estás fotografiando y vincularlas a tu vida.

En cuanto a la técnica. La mayoría de historias tienen un inicio, un desarrollo y un final. Necesitas una imagen dramática para captar el interés de tu audiencia. Luego puedes variar en planos como medianos o close-ups.

“Trato de imaginar las fotografías antes de tomarlas”, sostuvo.

2. Deja que las personas sepas que harás y por qué. La idea es que ellos sean tu compañeros durante la realización del trabajo.

Si están de tu lado, conseguirás mejor acceso y mejores fotos.

3. Respeta a los involucrados. No uses lentes largos. Ellos deben marcar los límites y decirte qué no podrías fotografiar, por ejemplo.

“He perdido algunas fotos por eso, pero no me arrepiento porque mi objetivo siempre ha sido mostrar la honestidad y la verdad”, afirmó.

Recordó que la historia estará completa si has dicho todo lo que quieres decir.

Revisa algunas fotos de Shames.