@EnLaCatedral es una cuenta de Twitter que recomendamos seguir. El proyecto se inició hace pocos días y se enfoca en la narración de «Conversación en La Catedral», una de las obras más reconocidas de Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura.

No se conoce al administrador de la cuenta que promete extractos de la obra–publicada en 1969 y que tiene más de 700 páginas–. La reproducción comenzó el 16 de enero pasado y se estima que tomará más de un año en culminar .

El diario El Comercio informa que la persona detrás de esta cuenta prefiere mantenerse en el anonimato, y que solo le interesa repasar la «magnífica obra a través de Twitter».

«Partiendo la obra en tuits uno vuelve a redescubrir la belleza de varias líneas, frases y momentos. Lo hago por eso, me hace disfrutarla (…) y si eso puede hacer que otros puedan disfrutarlo también, en tiempo real, pues tanto mejor. Les alegraré el día», explicó sobre su proyecto.

La cuenta ha tenido buena aceptación. Hasta el momento cuenta con más de 700 seguidores.»Me alegra mucho porque se nota que el interés por esta novela es muy fuerte, solo hay que tocar las teclas indicadas para revivirlo», manifestó.

«La literatura peruana ha sido admirada en muchas ocasiones alrededor del mundo. Vallejo, Arguedas, Moro. Tenemos un Nobel. Es decir, la literatura la llevamos dentro. Por eso creo que ha habido buen recibimiento», dijo a El Comercio antes de prometer que llegará a la última página usando la red de microblogging.

¿Conoces otras experiencias?

Lee este post: 10 reflexiones de Vargas Llosasobre el 

El Perú jodido, piensa, Carlitos jodido, todos jodidos.

— Conversación (@EnLaCatedral) enero 16, 2014

 

¿En qué momento se había jodido el Perú?

— Conversación (@EnLaCatedral) enero 16, 2014

 

¿En qué momento se había jodido el Perú?

— Conversación (@EnLaCatedral) enero 16, 2014

 

—Acompáñeme, vea en qué condiciones se trabaja —toma a Santiago del brazo, ácidamente le sonríe—.

— Conversación (@EnLaCatedral) enero 18, 2014

 

Hablan y a ratos oye tímidamente, respetuosamente a Ambrosio que se atreve a protestar: tenía que irse, niño.

— Conversación (@EnLaCatedral) enero 19, 2014