Los contínuos despidos de periodistas han hecho que los principales diarios de España El País, El Mundo, La Razón y ABC pasen de tener grandes redacciones y equipos especializados a tener periodistas ‘orquesta’, que escriben sobre diversos temas tanto para la edición impresa como para la edición digital.

Un artículo de PRnoticias destaca que, “cada día, los periodistas deben cubrir conferencias de prensa, ir corriendo a sus puestos de trabajo y preparar el tema para la edición digital que después adaptarán para darlo en el papel”.

Además, resalta que los profesionales deben encargarse de la cobertura para secciones enteras, un media  de tres páginas diarias, dejar material listo para las páginas que se publicarán en sus días de descanso y colaborar con los numerosos suplementos de los periódicos, y que los profesionales especializados en alguna área o tema han dado paso a los becarios.

“Al trauma de ver marcharse a sus compañeros, día a día, se une una desazón de la que, por ser políticamente incorrecta, nadie habla. Los que se quedan parece que no tienen derecho a la queja pero, aunque se les suponga privilegiados, llevan una gran carga emocional y profesional”, dice el post.

¿Les suena familiar esta descripción? Este es el escenario de la mayoría de diarios de Latinoamérica, no solamente en los pequeños sino también en los grandes. También ocurre en muchos medios españoles de provincia. Por ello, entre los comentarios al post de PRNoticias algunos lectores se refieren irónicamente al cambio de la realidad de los periodistas “acomodados” de los grandes medios.

Sí, son malos tiempos para los los diarios y periodistas españoles y vendrán peores, pero desde las pequeñas y grandes redacciones latinoamericanas que hemos trabajado así casi siempre, les quiero decir que, a pesar de… y en contra de…, aún se puede hacer periodismo del bueno, lo que no implica que haya que resignarnos a los recortes de personal y de presupuesto, a convertirnos en periodistas “orquesta” o “pulpo”, como otros los llamamos, como nos llamamos.

Publicado por:

Elena Miranda

Periodista.

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