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El estatus de leyenda del periodista Bob Woodward, quien hace 40 años convulsionó el escenario político de Estados Unidos al destapar el caso Watergate, ha sido puesto en duda en los últimos días, pues el reportero del Washington Post ha sido acusado de haber generado polémica en torno a una falsa amenaza de la Casa Blanca.

Hace más de una semana, Woodward declaró a Político que recibió un email de la Casa Blanca en el que se aseguraba que “se arrepentiría” de un editorial que censuraba la actitud de Barack Obama ante la entrada en vigor de los recortes presupuestales en EE.UU. La polémica estalló en las redes sociales y los políticos y medios de comunicación se apresuraron a tomar partido.

Sin embargo, al difundirse los mails que le escribió Gene Sperling, asesor de Obama en asuntos económicos, se comprobó que el mensaje no era amenazador y que, por el contrario, el funcionario se disculpaba con el periodista por haberle levantado el tono de voz y le insistía en que “no tenían por qué estar de acuerdo en el asunto de los recortes”.

El periodista escribió en el Washington Post que nunca había dicho que lo habían amenazado y que esas palabras las había escrito Político. Negó haberse sentido amenazado por la administración Obama, pero insistió en que el mensaje era “un ejemplo de cómo la Casa Blanca ejerce su poder”.

Aprovechando este escándalo “trivial”, el periodista Colby Tanner escribió un artículo en Slate sobre el comportamiento de Woodward y, específicamente, acerca de su actuación en el caso del actor y músico estadounidense John Belushi, muerto de una sobredosis de drogas en 1982.

Woodward publicó The Short Life and Fast Times of John Belushi, una biografía que fue criticada por los familiares y amigos del artista. Veinte años después, Tanner fue contratado por la viuda de Belushi para que escribiera una nueva biografía del actor.

Al revisar el libro y recopilar información sobre la vida de Belushi, Tanner dice que se dio cuenta de las fallas que cometió  Woodward y la falta de precisión al relatar varios momentos de la vida del comediante. “Woodward tiene una habilidad inigualable para desenterrar la información, pero no sabe qué hacer con la información una vez que la encuentra”, escribe.

Tunner relaciona el caso Belushi con el escándalo por la supuesta amenaza de la Casa Blanca y explica que Woodward malinterpretó lo que le dijeron, pero que a diferencia de la información obtenida de sus fuentes confidenciales, en el caso Besluhi y en el de la Casa Blanca, otros periodistas pueden volver a la fuente y ver el trasfondo del tema por sí mismos.

Lee el artículo completo de Slate aquí.

Publicado por:

Elena Miranda

Periodista.

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