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Un artículo en la revista Stern sobre el acoso sexual de un político a una periodista ha causado polémica en Alemania y ha desatado un interminable debate en los medios de comunicación y en las redes sociales de ese país, pues muchas mujeres se han animado a confesar que también han enfrentado similares problemas.

A fines de enero, la periodista Laura Himmelreich, de 29 años, publicó un  perfil del jefe del grupo parlamentario del Partido Liberal (FDP), Reiner Brüderle, de 67 años. Relató que, hace un año, el político fijó sus ojos en sus senos y le dijo que “podría llenar podría llenar perfectamente un Dirndl”, tradicional vestimenta bávara que resalta el busto de las mujeres.

“Los políticos también sucumben ante las periodistas”, fue la respuesta de Brüderle ante la protesta de la reportera. No contento con esto, el parlamentario la invitó a bailar, a lo que Himmelreich respondió con “Señor Brüderle, usted es un político y yo soy una periodista”. “Los políticos son esclavos de los periodistas”, contratacó el parlamentario.

La publicación ha remecido a todo el país. Miles de mujeres se sintieron identificadas con la periodista y usaron Twitter y otras redes sociales para expresar su indignación y compartir sus historias personales de acoso. Una de ellas fue Baschka Mika, exdirectora del periódico TAZ, quien contó que “Cuando tenía 30 años sufrí el acoso de un ministro, a los 40 de un productor de cine y a los 50 de un empresario, que después de beber un par de copas, me describió al oído el dormitorio donde quería dormir conmigo”.

Los más importantes medios de comunicación no cesan de tratar el tema que se ha convertido en el favorito de los talk shows y de los programas del horario estelar en la televisión. El diario Bild publicó un test titulado ¿Soy un Brüderle?, que plantea preguntas para que los hombres puedan reconocer si son o no acosadores.

Dirigentes del Partido Liberal defendieron a su jefe parlamentario, mientras que Brüderle ha guardado silencio, pese a que, según diversas encuestas, la mayoría de la población cree que debe pedir disculpas a la periodista. Incluso, algunos voceros han dicho que la denuncia es parte de una campaña contra el partido a pocos meses de las elecciones nacionales.

La canciller alemana Angela Merkel no se pronunció sobre este caso, pues el Partido Liberal es aliado de la coalición del gobierno, pero defendió “un contacto humano profesional y respetuoso” en política y entre los políticos y los periodistas.

Con información de El País y Bild.

Publicado por:

Elena Miranda

Periodista.

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